Ella las quiere como si fueran sus hijos y gasta anualmente más de 5 mil dólares para todos sus cuidados.
Tal vez te preguntarás ¿qué le compra a estas palomas con tanto dinero? Pues, si quieres conocer más esta historia, te invitamos a que continúes leyendo.
A las mascotas hay que quererlas y cuidarlas, de eso no hay duda, pero, hay personas que sobre pasan los límites de amor, sin importar cuánto deben sacrificar y cuánto dinero van a gastar en ellas. Por lo general, esto puede ocurrir en personas que tienen perros y gatos como mascotas, sin embargo, en esta ocasión, la historia es de dos palomas.
Esta pareja de aves viven con su dueña y cuidadora Meggy Johnson, quien las rescató cuando eran apenas unos pichones. Al llevarlas a casa, comenzó a alimentarlas directamente de su mano usando un tubo las 24 horas del día por unas 6 semanas, cada día. Gracias a ella, lograron recuperarse y se volvieron muy mansas, haciendo que se quedaran tranquilas a su lado.
Actualmente, están viviendo en Lincolnshire, Inglaterra y forman parte de su familia, por lo que, decidió ofrecerles todos los lujos que solamente se le puede dar a un hijo. Son aproximadamente 5.500 dólares que gasta esta mujer en cosas para sus dos palomitas.
Para que sepas más, ella las mantiene a la moda, les compró un guardarropa personalizado en el que le guarda todos sus atuendos, que son de diferentes conjuntos. Cada una de las prendas que usan las consentidas, tiene un precio de entre 30 y 35 dólares. Sí, como lo lees, pero, lo interesante de la ropa de las palomas, es que, están diseñadas para recoger las heces, lo cual permite que la casa siempre esté limpia.
Cuenta Meggy a la prensa local que, “Ambas tienen su propio dormitorio convertido, que es su espacio personal. Tienen todas sus pequeñas perchas, juguetes y guardarropa. Viven la vida del lujo. Son amantes de la moda y tienen su propio guardarropa con alrededor de 17 conjuntos, cada uno cuesta entre 30 y 35 dólares. Se ven súper geniales, pero los atuendos también son realmente prácticos porque atrapan su caca y ayudan a mantener mi casa limpia”.
Cuando llega la hora de paseo es lo más emocionante, tienen una correa de vuelo, con la que, su dueña los lleva a tomar sol y aire fresco. Pero, cuando el día está un poco flojo, los saca en un cochecito de bebé, de esta manera pasean cómodamente como unos reyes.
La mujer asegura que las ama y que siempre hará posible y necesario por mantenerlas bien.
