Unos activistas, encontraron a un gato sin poder moverse por la gran cantidad de barro y grasa que cubría su cuerpo.
Las cosas no son como quisiéramos que fueran, no todos los animales tienen la misma suerte, un hogar, comida y personas que los quieran.
Algunos deben pasar por ciertas calamidades que ponen en riesgo sus vidas, incluso, algunos hasta la pierden. Son miles de gatos y perros que deambulan por las calles, y se la pasan buscando alimento para sobrevivir. Muchos de ellos terminan maltratados por personas sin sentimientos ni escrúpulos.
Sin embargo, también existen personas que parecen ángeles al protegerlos, les dedican todo su amor y su tiempo para sacarlos de esa situación. La historia que te contaremos ocurrió en Sao Paulo, donde una pequeño gatito, estuvo atrapado en un montón de grasa y barro sin que pudiera moverse para nada.
Por suerte, el gato sacó fuerzas de donde no las tenía y maulló muy fuerte. Inmediatamente fue rescatado y lo llevaron hasta el veterinario para que lo examinaran y atendieran.
El diagnóstico que tenía el veterinario no era el mejor, de verdad que era preocupante su situación, por lo que, tenían que actuar con rapidez para tratar una infección en la sangre que estaba padeciendo. Además de ello, había algo más que complicaba todo, estaba envenenado por la cantidad de grasa que tenía en su cuerpo.
Los doctores lograron que el gato sobreviviera, alegando que “revivió” y le pusieron un nombre, ahora se llama Francisco, en honor a San Francisco, patrón de los animales que celebra su día el 4 de octubre.
Fueron unas 3 horas aproximadamente que pasaron para decir que ya estaba completamente listo. Lo más difícil fue durante el primer día de su rescate, ya que, la intoxicación le estaba provocando movimientos involuntarios y desorientación, lo cual causó preocupación en los doctores.
Al día siguiente, ya estaba mejor, todos estaban felices celebrando su gran mejoría. Cuando lograron limpiarlo y quitarle toda la suciedad, pudieron ver lo hermoso que es ese valiente gatito y, no podían creer como sufrió tanto.
Por ahora, lo más importante es que ya está bien, y deben buscarle una casa y una familia que pueda adoptarlo.