Gracias a los dibujos que hacía de su aldea cuando era un niño, este hombre pudo reencontrarse con su madre biológica 33 años después.
Mundialmente, cada día desaparecen cientos de personas, las cuales, lamentablemente, terminan siendo presa de muchas mafias dedicadas a la trata de personas. La mayoría de ellos, suelen desaparecer desde que son muy pequeños, siendo separados de sus padres en contra de su voluntad.
Así fue el caso de Li Jingwei, quien fue separado de su madre cuando tenía tan solo 4 años de edad. Lo peor de esta historia, es que, Li no fue secuestrado por un desconocido, sino que, por el contrario, era un conocido de la aldea en donde vivía con su madre y su familia, durante los años 80.
Según la información que proporcionó el canal CNN, el niño secuestrado, estuvo viviendo y creció todo este tiempo con otra familia en la provincia central de Henan. Pese a todo esto, Li siempre recordaba que vivía en otro lado, pero no podía recordar los nombres de sus padres y el de su pueblo.
Li no tenía la capacidad suficiente para regresar a su casa, pues, tampoco contaba con alguna información de su vida anterior, solo recordaba cómo era su pueblo y lo destruido que estaba. Es así como cada vez que se sentía triste, se sentaba a dibujar su anterior aldea con lujo de detalle, tal y como estaba en su mente.
En los dibujos, incluía todas las características de los paisajes, tales, como, los animales que siempre estaban, los caminos, ríos, carreteras y casas de alrededor. Recientemente, Li decidió publicar su historia, inspirado por las noticias que han estado apareciendo en los medios de comunicación acerca de niños que han desaparecido y han sido secuestrados, pero que, finalmente, se han podido reencontrar con sus padres.
Por ello, dibujó un boceto de su pueblo, así como solía hacerlo cuando era niño y lo publicó en sus redes sociales mediante un video, el cual tenía este mensaje, “Han pasado muchos años, no sé si alguien de mi familia me está buscando, pero quiero volver a ver a mis padres mientras todavía están aquí“.
Fue de esa forma, como su caso tomó fuerzas y las autoridades lograron identificar a una mujer que sería la posible madre biológica de Li. Mediante una serie de pruebas de ADN, se pudo terminar de comprobar que, en efecto, se trataba de madre e hijo.
Luego de un par de semanas, ambos pudieron reencontrarse, gracias a la investigación de las autoridades y también, de algunos usuarios que tuvieron cierta participación en internet. “Finalmente encontré a mi bebé“, dijo la madre durante el reencuentro.
