Estos pitillos, pajillas o como quieras llamarles, son hechos con almidón de arroz con una intención ecológica.
Una pareja de jóvenes de Malasia, tuvieron la iniciativa de crear unos pitillos biodegradables, elaborados a base de almidón de arroz y tapioca. Son totalmente ecológicos, ya que, cuando termines de tomarte tu bebida podrás comértelos o bien podrías botarlos a la basura sin ningún problema, ya que se biodegradan automáticamente en 3 meses.
La mayoría de los males del planeta Tierra se deben a la contaminación ambiental. Esta se produce, generalmente, por la acumulación de basura no procesada debidamente y la falta de reciclaje. El plástico, es uno de los principales objetos de contaminación y, además, es causante de la muerte de algunas especies de animales, algunos de ellos en peligro de extinción.
Muchas personas están comprometidas con el ecosistema, sobre todo en estos tiempos en los que la naturaleza parece que nos habla, los inventos e innovaciones en pro de la conservación del ambiente no cesan en salir a la luz.
Un ejemplo viviente de ello, son estos jóvenes de Malasia que han mostrado su novedoso invento, ya que su país está en estos momentos en la lista de los 10 países mala gestión de residuos de plástico, que lamentablemente terminan en los océanos, afectando a miles de criaturas marinas.
Por ello, los jóvenes malayos que pertenecen a NakedWonders, comenzaron a rechazar las pajillas de plástico, reemplazándolas por las biodegradables creadas por ellos mismos y que son completamente comestibles.
Llevan por nombre Fàn-Straws, su diseño es igual a las convencionales pero con la diferencia en los materiales que han sido elaboradas. Terminas tu merengada y te las puedes comer, pero si lo olvidaste y la tiras a la basura, no te preocupes, ellas de biodegradan en unos días. Si las pajillas llegan hasta el mar, a los pocos segundos se derriten convirtiéndose en alimento para los peces.
Uno de los creadores de esta maravilla explica: “Las pajillas pueden ser utilizadas como fertilizantes para plantas. Duran de 2 a 4 horas en las bebidas frías y de 1 a 2 en bebidas calientes; la mejor parte, sin embargo, es que la pajilla no altera para nada los sabores de las bebidas”.
¿No te parece increíble esta idea?
