Debes evitar cometer estos errores comunes a toda costa si deseas que tu próxima manicura quede hermosa cuando uses esmalte semipermanente
Debido a sus innumerables ventajas, la manicura con esmalte semipermanente actualmente se encuentra entre las más populares y solicitadas por las chicas. Posee un mejor acabado y suele tener una mayor duración a diferencia del convencional. Aun así, existen algunos errores que pueden conllevar a una mala aplicación del esmalte e incluso ocasionar problemas con las uñas.
Por lo tanto, para lograr uñas impecables, hermosas y estéticamente agradables con este tipo de manicura, hay una serie de cosas a las que se le debe prestar atención, incluida la preparación de las uñas, el uso de productos inadecuados y los métodos de secado. En el siguiente post, te detallamos cuáles son esas cosas que debes corregir para aprovechar al máximo esta técnica con esmalte semipermanente.
- Preparación de las uñas
Una de las particularidades del esmalte semipermanente es que puede tener una durabilidad de entre 2 y 3 semanas en perfecto estado. Sin embargo, para que esto suceda, es indispensable preparar muy bien las uñas antes de aplicar el esmalte. Al no hacerlo, estarás cometiendo un error que puede afectar tanto el acabado como la duración de la manicura.
De hecho, no es más complejo y es casi igual a lo que se hace con el arreglo de uñas habitualmente. Comienza por lavar y desinfectar muy bien las uñas, para luego empujar las cutículas hacia atrás, cortar los minúsculos remanentes de piel y limar con la forma anhelada.
- Productos de mala calidad
Comprobar la calidad de los esmaltes semipermanentes es crucial para conseguir los resultados esperados tanto en acabado como en duración. Hoy en día, en el mercado existen algunos productos que, a pesar de ser muy económicos, poseen componentes que se dañan con facilidad y que pueden perjudicar la salud de la uña.
Por lo tanto, también es necesario verificar la idoneidad del Primer, un producto que se utiliza para deshidratar la uña y así facilitar la adherencia del esmalte. Si este es ácido, puede afectar la uña.
- Aplicar esmalte fuera de la uña
Otro de los errores más comunes entre las aprendices que usan esmalte semipermanente es que dejan caer pintura por fuera de la uña. Al ocurrir esto, el área se levanta y a menudo se engancha con cualquier cosa, lo que puede estropear la pintura más fácilmente. Para evitar esto, lo mejor es aplicar el esmalte de uñas muy cuidadosamente.
- Aplicar más producto del necesario
Otro aspecto a tener en cuenta con este tipo de esmalte, es la cantidad de producto que se va a aplicar. Si la capa de esmalte es muy gruesa, es probable que la luz de la lámpara UV/LED no penetre adecuadamente. En consecuencia, quedará un esmalte blando y arrugado, con un aspecto desfavorable. Lo mejor, en este caso, es aplicar una capa delgada y uniforme de esmalte.
- No realizar un buen secado
El secado también tiene sus secretos. Lo más recomendable es esperar aproximadamente 50 segundos al aire libre, entre la aplicación de una capa a otra, luego de “curar” o pasar por la lámpara UV. Al no hacer esto, la pintura puede abultarse o arrugarse, dando lugar a un resultado poco agradable.
- Deja el borde sin sellar
La punta de la uña es la más vulnerable al roce y rotura. Por ello, es importante sellar el tip, bien sea para que la uña se vea mucho más pulida, como para que el esmalte semipermanente dure más tiempo en excelente estado.
- Uso incorrecto de la lámpara
Si quieres reducir el tiempo de secado y curado, lo ideal es elegir una lámpara que garantice la potencia adecuada. Las mejores para ello, son las lámparas UV/LED. Por otra parte, es indispensable introducir bien los dedos en la lámpara, de manera que queden bien estirados y la luz abarque toda la superficie de la uña. Al no hacer esto, el esmalte podría deteriorarse prematuramente.
- Arrancar el esmalte
Muchas veces, en este tipo de manicura se produce una pequeña rotura en la uña o un desgaste del esmalte. Ante esta situación, hay quienes arrancan la pieza desprendida o liman vigorosamente la uña para quitar el esmalte semipermanente. El problema es que retirar el producto de manera brusca puede provocar daños en la superficie de la uña.
- Elegir el top coat equivocado
El top coat es el producto transparente con acabado brillante o mate que sirve para sellar el esmalte y proteger el color. Al momento de comprar este producto, asegúrate bien sobre cuál escoger, ya que no es lo mismo el que se usa para acrílico o gel que el indicado para esmalte semipermanente. Aplicar un top coat inadecuado puede facilitar el desperfecto de la manicura, esta puede agrietarse o romperse.
Tips para aplicar el esmalte semipermanente de forma correcta
Al aplicar el esmalte semipermanente, estos son los tips que se deben tener en cuenta para hacerlo de manera correcta y no cometer errores:
- Limpieza de uñas: comienza eliminando todo resto de suciedad con un limpiador y un algodón. También, puedes remojar las uñas utilizando jabón neutro y agua tibia. Las uñas deben estar perfectamente limpias antes de aplicar el esmalte semipermanente.
- Aplicación de polímeros: aplica primero una capa fina de base con polímeros de liberación rápida. Posteriormente, cura con la lámpara UV/LED durante 20 segundos para proteger la uña y facilitar la fijación del esmalte.
- Esmaltes de uñas a base de gel: este producto suele ser más duradero y proporciona dureza a las uñas.
- Aplicación de dos capas de esmalte: aplica la primera capa de esmalte e introduce tus manos bajo la lámpara durante 60 segundos. Extiende las manos y espera un minuto. Luego aplica la segunda capa y vuelve a repetir el procedimiento.
- Sellado con el top coat: por último, aplicael top coat e introduce las manos bajo de la lámpara durante 2 minutos.
Conclusión
Para lograr que el esmalte semipermanente te dure por más tiempo, recomendamos aplicarte varias gotas de aceite de ricino sobre las uñas, una vez a la semana. Esto, además, de aumentar la duración del acabado, también aporta hidratación y fortalecimiento.
También, lo mejor es dejar pasar cierto tiempo entre una aplicación de esmalte semipermanente y otro. Esas pausas son muy favorables para tus uñas y evitan que se dañen a medio o largo plazo. Solo asegúrate de mantenerlas siempre limpias y en buenas condiciones.