La violencia se ha hecho presente en Kabul, cada vez son más los ataques y las victimas en este lugar. Los hechos hablan por sí solo.
Los habitantes de este lugar viven en una zozobra puesto que salen a la calle y no saben si regresan o no a sus casas. Niños, adultos y ancianos están en un constante peligro y temen por sus vidas.
Los ataques y las muertes se habían pausado desde mediados de agosto, sin embargo, nuevamente se ha presentado un ataque sin precedentes donde los atentados fueron con explosivos contra el hospital militar de Afganistán.
Este ataque dejó al menos 19 muertos y 50 heridos, la furia y el odio del grupo yidahista se hizo presente en contra de los talibanes, este potente rival Estado Islámico fue con gran hazaña contra Afganistán.
Los heridos fueron repartidos por diferentes hospitales de Kabul, el responsable sanitario suministro esta información, aunque no quiso dar a conocer su identidad.
Por su parte un dirigente talibán indicó que hubo una primera explosión en la puerta del hospital militar Sardae Mohammad Dawood Khan y otra segunda en las inmediaciones del centro sanitario, ambas seguidas por disparos de un testigo.
Cabe destacar que estas explosiones son el último episodio de una mortífera serie de ataques en el país desde la llegada al poder a mediados de agosto de los talibanes, enfrentados con la rama local del Estado Islámico. La acción de este martes aún no ha sido reivindicada por ningún grupo.
Dentro del hospital una fuente médica narro los hechos ocurridos, indicando que escucharon una fuerte explosión a la altura del primer control del hospital. Estas personas se fueron a resguardar en habitaciones seguras. También se escucharon detonaciones.
Los disparos de armas se extendieron por mucho tiempo dentro del edificio del hospital, al parecer los atacantes recorrieron habitación por habitación, como la primera vez que atacaron.
Soldados heridos atendidos en el hospital
Este recinto, atiende a soldados heridos de los talibanes y las fuerzas de seguridad del gobierno derrocado, había sido previamente asaltado en 2017 por hombres armados vestidos de personal médico que mató a decenas de personas.
Durante horas, los asaltantes fueron visitando habitación por habitación disparando a los pacientes o apuñalándolos cuando se quedaban sin munición. La acción fue reivindicado por el EI, aunque algunos supervivientes apuntaron a los talibanes.
Aunque ambos son grupos sunitas radicales, el Estado Islámico y los talibanes están enfrentados por la estrategia de seguir en Afganistán.
Los ataques no han cesado en Kabul desde que empezó la violencia hace unos meses, lo que indica que en cualquier momento pueden continuar los mismos.