Este hermoso acto de los sacerdotes, dejó con el corazón chiquitico a todos los que presenciaron cómo salieron a bendecir a las mascotas.
Los animales son criaturas adorables que debemos cuidar y respetar, más allá de que les guste o no, son seres vivos y son creación de Dios, por ello, estos sacerdotes filipinos, decidieron salir a la calle para dar la bendición a estos pequeños seres que siempre nos llenan de alegría.
El acto de amor fue realizado por estos sacerdotes, con motivo de la celebración del Día Mundial de los Animales, día de fiesta del patrón de los animales San Francisco de Asís, el 4 de septiembre. Para hacer la bendición, les arrojaron agua bendita a todas las mascotas que pasaban en los vehículos con sus dueños, esto lo hacen para crear un rito de una vida con plena felicidad.
En Manila, Filipinas, estos curas, le dieron la bendición de forma segura y respetando las medidas sanitarias para evitar el contagio del virus, por lo que se mantuvo la distancia prudencial, el sacerdote afuera y la mascota asomada en la ventana del auto con sus dueños, así como puedes observar en las imágenes.
A los padres no les importó qué animal era, simplemente los bendecían para dar una vida larga, feliz y saludable, habían perros y gatos. Cada año, se practica la bendición de las mascotas en Filipinas, en la que, por lo general, se reúnen un gran número de feligreses, pero, con las restricciones por la cuarentena, esta vez se realizó diferente. Tanto los sacerdotes como los dueños de las mascotas usaron mascarillas.
El representante del centro comercial de este evento comentó que “Puede que no podamos celebrarlo como estábamos acostumbrados, pero aún tenemos muchas razones para estar agradecidos por los momentos que pasamos con nuestros leales amigos, las mascotas”.
Los cuidados que se tuvieron al momento de la celebración fueron extremos, ya que Filipinas es uno de los países del sudeste de Asia con la peor cifra de brote del virus, por ello, algunas de las personas que no tienen vehículos y no pudieron salir de sus casas, mantuvieron a sus mascotas frente a la televisión y los ordenadores para que les dieran la bendición de forma virtual.