Un desastre natural ha causado un caos donde tanto adultos como niños han perdido la vida y los daños han sido irreversibles.
Las fuertes inundaciones y riadas provocadas por la intensa temporada de lluvias dejo al menos 113 muertos al este de Indonesia y la pequeña nación de Timor Oriental, asimismo hay decenas de personas que se encuentran desaparecidas.
En las provincias de Flores Este, Alor, Lembata y Ende, han muerto 86 personas, mientras que aún se encuentran 71 personas desaparecidas, según los datos de la Agencia nacional de rescates.
Francisco Guterres “Lú-Olo” presidente de Timor Oriental, ha calificado las inundaciones de “gran calamidad” y aseguró que las autoridades continúan trabajando arduamente para establecer la verdadera dimensión de los daños y el número de víctimas.
Los medios de comunicación han informado de que al menos 27 personas han muerto allí debido al temporal. De las víctimas, 13 se han registrado en la capital, Dili, se encuentra parcialmente anegada. De esas trece víctimas se registró que seis eran niños.
Por su parte las autoridades siguen trabajando en Flores Oriental para mitigar el efecto del desastre y que continúa la búsqueda de cadáveres. Siguen recorriendo el medio local Detik.
Zonas afectadas con difícil acceso
El cuerpo de rescate ha tenido dificultades para abordar las zonas afectadas, solamente pueden llegar por vía marítima, esta alternativa resulta muy difícil debido a los fuertes vientos y el oleaje que golpean la zona.
El aguacero duró nueve horas en la región de la Regencia de Bima, en la isla de Sumbawa, ocasionando fuertes inundaciones de hasta dos metros, provocando al menos dos fallecimientos y afectando a más de 27.000 personas.
De antemano la agencia indonesa de meteorología advirtió de que se presentaran fuertes lluvias en la próxima semana, aquí las épocas de lluvia tienen lugar por lo general entre noviembre y marzo.
Este país ha sufrido 1.030 desastres naturales en lo que va de año, entre estos podemos mencionar terremotos, inundaciones, incendios, aludes de tierra y tornados, causando la muerte de 282 personas hasta los momentos.
Es necesario mantenerse alerta los próximos días y tomar las previsiones adecuadas por los pronósticos que ya han advertido los entes a cargo.