En Venezuela existe un drama económico, que se ha agudizado con la llegada de la pandemia, ha seguido su curso durante la crisis que ha azotado al mundo entero, y este 2021 no será la excepción, pues se espera un nueva caída de 10%.
Esto genera, de acuerdo a las estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), que desde el año 2013, cuando el actual presidente Nicolás Maduro tomó las riendas del país, el PIB de Venezuela vaya a perder, al cierre de este año 2021, el 83,5 % de su tamaño, pasando de los US$258.993 millones que tenía en esa época, hasta apenas US$42.530 millones de la actualidad.
Al finalizar el 2020, cuando la economía mundial presentó su peor comportamiento en décadas, el PIB venezolano habría caído un 30%, que dejó su indicador con una cifra de US$47.255 millones al cierre del ejercicio.
Pronósticos no muy favorables
Venezuela registrará también un dudoso hito en 2021, y es que mientras para el resto de la humanidad se esperan repuntes este año frente a las caídas de la pandemia, este será uno de los pocos países que continúe en rojo, junto con otros como es el caso de Myanmar (-8,9%) Bielorrusia (-0.4%) y Bután (1,9%).
Lo que significa, que la nación presentará un desplome más grande este año. Cabe destacar que el FMI no tiene datos de Libia, Siria y Sahara Occidental.
Esta crítica tendencia también se mantendría en el 2022 según datos del FMI, año en el que se prevé que mostrara una caída de 5% que sería menor cifra desde 2014.
Vale la pena resaltar que este comportamiento, por supuesto, también se traduce en peores condiciones para las personas. La evolución que ha presentado la inflación durante los últimos años en el país vecino Colombia ha sido otro de los factores que más han golpeado a los venezolanos.
La hiperinflación continua
Sin embargo, el peor año que presento Venezuela en cuanto a crecimiento de índice de precios fue 2018, en el que aumentó 130.060 % desde entonces han seguido cifras muy elevadas como: 9.586% en 2019, 2.960% el años pasado y para este 2021 se prevé un 2.348% según datos del Emisor y la Universidad Católica Andrés Bello (Ucab).
También ha presentado unas dramáticas cifras durante el último año el tipo de cambio entre el bolívar soberano y el dólar estadounidense, siendo está una tendencia que ha provocado que el país haya tenido, prácticamente, que adoptar el dólar para las transacciones diarias de la ciudadanía.