La acerola es una fruta tropical con un rico sabor entre dulce y ácido, muy apreciada por su alto contenido de vitamina C, un nutriente fundamental para las distintas funciones del cuerpo.
¿Qué es la acerola?
La acerola es un árbol oriundo de América Central, del Sur de México, las Antillas y América del Sur, muy aprovechado por los nativos desde antes de la colonización europea iniciada a finales del siglo XV.
Según los países donde se cultiva, la acerola también se le conoce como semeruco, cereza de Barbados, manche, cerecita, cereza de las Antillas y cereza colorada. Su nombre científico es Malpighia emarginata.
De este arbusto nace su fruta, también conocida con el nombre de acerola, similar en aspecto y tamaño a las cerezas, o más bien a manzanitas pequeñas. Al desarrollarse, las acerolas se tornan de verde a tonos amarillos, tomando su particular color rojo cuando maduran completamente. En cuanto al gusto, la acerola tiene un sabor agridulce.
Esta fruta ya era transportada por los nativos en sus viajes entre islas, expandiendo el fruto desde mucho antes del descubrimiento de América.
Por su parecido con la cereza europea, los españoles la llamaron “cereza de las Indias Occidentales” West Indian Cherry. Pero entre otras diferencias con la cereza europea (Prunus cerasus L.), la fruta originaria de tierras americanas contiene tres semillas en su interior. Brasil, Puerto Rico y Florida son los principales productores de acerola a nivel mundial.
La fruta se usa para la preparación de mermeladas, jugos, helados, gelatinas y licores. En Japón, llegó a comercializarse como un refresco, promocionado por sus grandiosas “vitaminas naturales”. Alemania ha utilizado la acerola para fortalecer jugos, y en Estados Unidos se emplea como un complemento vitamínico en la industria farmacéutica.
Propiedades de la acerola y usos medicinales
Gracias a que es una rica fuente de vitamina C, la acerola es muy apreciada por su alto valor nutricional. Pero también gracias a los beneficios medicinales que aporta como el ácido ascórbico, también conocido como vitamina C, un antioxidante natural con una representación clave en el sistema inmunológico.
A la acerola se le atribuyen propiedades tonificantes, por lo que se considera una fruta como un estimulante natural con potencial terapéutico en casos de fatiga, somnolencia y debilidad.
Asimismo, esta fruta posee una buena acción antinfecciosa, contribuyendo en la protección contra las infecciones, para curar y prevenir la gripe y los resfriados, así como para estimular las defensas del organismo contra los gérmenes.
Se recomienda el uso de la acerola durante la convalecencia de personas con desgaste físico y mental, en aquellas personas que llevan tratamientos por exceso de peso, en problemas como la anorexia y también para deportistas.
En la medicina popular, esta fruta goza de gran popularidad por sus posibles virtudes en casos de reumatismos y artrosis al proteger las articulaciones; en cuadros de anemia, trastornos de colesterol, para la prevención de problemas cardíacos, aliviar un poco la ansiedad y el estrés, entre otros muchos usos.
También a la acerola se le atribuyen propiedades medicinales como anitiinflamatorias, antianémicas, diuréticas y antioxidantes.
Para fumadores
Personas fumadores o que hayan fumado anteriormente también pueden beneficiarse de las altas dosis de vitamina C que contienen las acerolas, debido a que en estas personas las necesidades de este nutriente suelen ser mayores, en comparación a aquellos que tienen la suerte de no fumar.
Para la piel
Aparte de su importante contenido en vitamina C, esta fruta también contiene sales minerales beneficiosas para la remineralización de la piel y otros compuestos con efectos hidratantes. De ahí su uso en la industria cosmética, aprovechándose los extractos del fruto para la elaboración de productos cosméticos.
Otros de los beneficios de la acerola es su excelente acción contra el envejecimiento de la piel. Gracias a sus propiedades antioxidantes, los compuestos de esta fruta pueden contribuir a retardar los signos del envejecimiento.
La acerola, es una rica fuente de vitamina C, hierro, calcio y vitaminas del complejo B, muy importantes para combatir los radicales libres y evitar el envejecimiento precoz. Esta fruta es la aliada perfecta para combatir las alergias y los resfriados. Es muy recomendada para subir las defensas del cuerpo.
También, gracias a su alto contenido de vitamina C, la acerola puede actuar como protector solar para disminuir el daño solar.
Acerola, reserva natural de vitamina C
La Comisión Europea indica que la vitamina C almacenada en las acerolas favorece el funcionamiento normal del sistema inmunitario, disminuye el cansancio, ayuda antes, durante y después de hacer ejercicio físico intenso y también para estimular la función normal del sistema óseo.
¿Cuál es el contenido de vitamina C de la acerola?
Los datos sobre la composición exacta de vitamina C que posee una fruta pueden variar mucho, ya que depende de muchos factores como: su estado de madurez y conservación, el tipo de variedad, el método de cultivo y cosecha, entre otros.
En este sentido, la acerola contiene una alta cantidad de vitamina C, ubicada en el rango de 1500-4500 mg / 100 g, que es aproximadamente de 50-100 veces mayor que la de naranja o limón.
En promedio, 100 gramos de acerola fresca (parte comestible) contiene entre 1500 y 3000 mg de vitamina C. Mientras más maduro está el fruto, el contenido de vitamina C es menor. Es decir, mientras más verde esté, más vitamina C contiene.
¿Cómo consumir la acerola?
Lo mejor manera de consumir la acerola es comerla totalmente al natural. En el mercado, generalmente, se venden jugos/zumos, tabletas masticables, cápsulas, extracto en polvo y suplementos de vitamina C naturales basados en la acerola.
¿Cómo hacer jugo de acerola?
Preparar el jugo de acerola es muy sencillo, solo se necesita la fruta, un poco de agua, una licuadora para procesar y un colador para quitar los restos de semillas, y por último servir bien frio. No necesita diluirse en agua, por lo que también se puede beber solito y endulzarse a su gusto. Se recomienda beber de este jugo 50-100 mililitros por día.
¿Dónde se puede conseguir la acerola?
La acerola es un arbusto que crece en zonas de clima tropical y subtropical. Esta fruta suele deteriorarse a los pocos días de madurarse, siendo difícil la exportación de este fruto fresco. Esta se puede conseguir en mercados, fruterías, y hasta en zonas rurales de Venezuela y otras partes del mundo.