Tal vez nadie podría creer que el espacio contara con las condiciones suficientes como para que se pueda cultivar vegetales, pero sí.
Plant Habitat-02, es un programa especial de agricultura espacial que ha llevado a cabo la NASA, donde se cultivaron unas cuantas semillas de hortalizas en el interior de una estación espacial. Aunque nadie podría creer que esto pudiera ser cierto, sí lo es, un grupo de astronautas de la NASA lo han hecho realidad y aquí está el resultado de su experimento.
Son los primero rábanos en ser cultivados fuera del planeta Tierra, dentro de la Estación Espacial Internacional, así lo comunicó la United Press Iternational UPI, en la que los astronautas, han recibido al nuevo año 2021 en el espacio, comiendo los primeros rábanos cultivados por ellos en la estación espacial y, como se puede ver en las imágenes, lo están disfrutando.
Dentro del proyecto Plant Habitat-02, decidieron cultivar hortalizas en medio de la microgravedad durante al menos 27 días, esto fue hecho con la intención, no solo de que los astronautas tuvieran acceso a productos frescos, sino que también se pudiera corroborar que en esas condiciones se cosechara hortalizas aptas para el consumo humano.
Kate Rubins, una de las astronautas que participó en la hazaña, fue la que se encargó de cosechar los primeros rábanos del espacio, conservando sus hojas para traerlas a la Tierra en su regreso para que sean analizadas por los científicos.
Según Kate, los rábanos son muy similares a los que ella cultivaba en su jardín, asegurando ella y su compañero Mike Hopkins, que comer un alimento fresco es una gran experiencia, sobre todo por lo limitados que están con los productos de la Estación Espacial Internacional.
Comenta Karl Hasenstein, quien es participante, investigador principal de este proyecto y profesor de biología en la Universidad de Louisiana, que estos alimentos “son mucho más frescos y limpios” que los encuentras en cualquier tienda en la Tierra.
La cámara de cultivo que se utilizó para la siembra de las semillas de rábano en el espacio, fue diseñada y elaborada por el director de operaciones de la compañía, Dave Reed, quien afirma que los rábanos se ven muy bien y que fueron cosechados 19 en total, de los cuales 9 se dieron a los astronautas para que los comieran, mientras que el restos fueron congelados para su posterior análisis en la Tierra.