Su ex pareja le roció una sustancia química que le desfiguró el rostro pero, ha recibido un trasplante de cara.
Esta mujer de nombre Carmen Tarleton tiene 53 años y, hace 14 años fue víctima de un salvaje maltrato. Su ex pareja la golpeó fuertemente con un bate de béisbol y la roció con una sustancia química en el año 2007.
Carmen ha superado poco a poco el trauma vivido hace más de diez años y se ha hecho hasta ahora dos trasplantes de rostro. De hecho, pudo mostrar los resultados por primera vez en una entrevista en el programa Today Show.
La mujer es oriunda de los Estados Unidos, quien cuenta que su vida cambió rotundamente en el año 2007 cuando su ex marido la agredió con un bate de béisbol y le roció lejía. Hace unos siete meses atrás, se sometió a su segunda intervención quirúrgica para recibir un trasplante de rostro.
De esa forma, se convirtió en la primera persona en su país en recibir ese tipo de trasplantes por segunda vez. El primero se lo hicieron en el año 2013, pero 7 años después se dio cuenta que su cuerpo lo había rechazado. Comentó Carmen que “Cuando falló mi primer trasplante de cara, básicamente volví a lucir desfigurada, hasta perdí los labios”.
En el año 2009, su ex marido reconoció ser culpable del ataque y fue arrestado y sentenciado a más de 30 años de cárcel, en donde murió más tarde en el año 2017. La mujer ya ha pasado por unas 73 cirugías reconstructivas, por eso la decisión de someterse a otra una vez más no le resultó difícil. Ella le comentó a su médico que si ella podía ser candidata, quería tener otra oportunidad.
Fue operada en el Hospital Brigham and Women’s de la ciudad de Boston, con un total de 40 doctores que participaron en la cirugía que duró dos días. El Dr. Bohdan Pomahac, ha sido su médico por más de una década y comentó que siempre ha sido complicado. El piensa que la segunda vez resulta mucho peor, pues de alguna manera se está lidiando con grandes incógnitas de nuevo.
Para hacerle el trasplante a Carmen, se necesitó a un donante que, en este caso, fue Casey Harrington Labrie, una mujer de 36 años que falleció producto de una sobredosis de fentalino. Fue una adicta a la heroína.
La cuñada de la donante comentó que sus órganos salvaron a cinco vidas en total. Bobbi expresó que “Fue una bendición para nosotros como familia. Nos dio esperanza en lo que de otra manera parecería ser un momento completamente desesperado, especialmente para la hija de Casey”.
Hoy en día, Carmen sigue recuperándose, tiene mucha paciencia y está llena de esperanza, pues, cada día va mejorando su apariencia.
