En la población venezolana ya se ha hecho cotidiano comprar diferentes artículos en dólares, debido al alza de los precios semanalmente, lo que es catalogado por muchos como una inflación en dólares. Esto se presenta en el país gracias a la constante devaluación del bolívar y las distintas fallas en los métodos de pago tradicionales, lo que ha generado que esta forma de pago más rentable sea la divisa norteamericana.
Asimismo, es una nueva dinámica que se ha venido observando en los diversos comercios de la capital, y en casi todos los establecimientos reciben como pago esta moneda e incluso en ferreterías, supermercados y zapaterías.
Por su parte, la mayoría de comerciantes quienes fueron encuestados coincidieron en el mismo análisis que resulta más barato pagar el producto en dólares que en bolívares. El deterioro del bolívar aumenta al transcurrir los días e incluso las horas por lo que la mercancía que fue obtenida a un tipo de cambio más elevado al estipulado en las mesas de cambio y en los marcadores paralelos.
Por otro lado, podemos observar que se ha popularizado a nivel nacional, lo que muchos califican como fiebre por los bodegones, que en su totalidad están surtidos por artículos importados y de muy difícil acceso para el venezolano de a pie, pero es el lugar donde se encuentra de todo.
Cabe destacar que, en la mayoría de estos locales se manejan de acuerdo a la tasa paralela del día, lo que además va a depender de las políticas que maneje el negocio.
Por lo general aquí los productos suelen estar marcados en bolívares en el anaquel e inclusive en la factura, pero en el momento de cancelar la compra, se emplea con el equivalente en dólares.
Es importante resaltar que esta nueva modalidad ha trascendido a supermercados, tiendas de ropa, zapaterías e inclusive a ferreterías en distintas partes del país.
Asimismo, los comerciantes aseguran que el alza de los precios se da pese a la baja de dólar en las últimas semanas, ellos aseguran que la mayoría de la mercancía con la que han surtido su negocio fue comprada con el tipo de cambio muchísimo mayor al cotizado en la tasa paralela y oficial.
Esto ocasiona que algunos ciudadanos prefieran manejar el dólar, en lugar de la moneda nacional.