Los habitantes de Wuhan, China, quedaron en completo encierro por causa del coronavirus que los azota.
Esta ciudad china, tiene aproximadamente 11 millones de habitantes, los cuales han quedado totalmente aislados y sin posibilidades de salir de ella, debido a un fuerte virus del que están siendo víctimas.
Desde el 31 de diciembre de 2019, inició un brote de este virus, en donde se habían reportado al menos unas 27 personas con neumonía de origen que aún se desconoce y de los cuales 7 de ellos estaban en condiciones bastante graves.
Entre los síntomas que se presentan, es que el virus comienza a infectar las vías respiratorias, ocasionando tos, fiebre y dificultad para respirar, de hecho, puede ser potencialmente mortal.
Desde el mismo momento en el que el estado puso en alerta al mundo sobre ello y, por su rápida expansión, se mantienen en cuarentena, suspendiendo vuelos, transporte público y haciendo bloqueos a las diferentes carreteras que conduces a las afueras de la ciudad.
Esto quiere decir, que los once millones de personas que viven en Wuhan no pueden moverse de allí. Los mercados disponibles en la ciudad ya han sido desabastecidos y se les hace imposible salir a la calle sin sus mascarillas. En las imágenes que hemos recopilado, se puede ver cómo luce esta ciudad hoy tras el paso del coronavirus.
La ha dejado totalmente desolada, tiendas cerradas, centros comerciales clausurados, poca gente caminando en las calles y, los pocos comercios y establecimientos que tienen las puertas abiertas, mantienen un estricto régimen de seguridad para evitar la propagación del virus mortal. Se puede observar que todos llevan mascarillas.
Las estaciones del tren también se encuentran cerradas, y como tampoco hay busetas, las pocas personas que hay en la calle se deben ir caminando hasta sus casas o lugares de trabajo.
Entre los pocos mercados que puedan estar abiertos, se encuentran saturados de gente intentando comprar víveres y otros alimentos para su familia. Otros recorren la ciudad a pie intentando encontrar algún mercado donde puedan comprar verduras.
Es en realidad, un momento bastante angustioso y desesperante para estas personas y también para el resto del mundo, quienes nos encontramos a la espera de que pronto esa pesadilla termine.
