Una vez que la mujer dio a luz, la policía la llevó a ella y su bebé hasta el hospital para que recibieran las atenciones.
Hay historias que de verdad conmueven, así es el caso de esta mujer que comenzó su trabajo de parto y no le dio chance de llegar al hospital. Así también, está el otro lado, el de los policías, quienes diariamente deben enfrentarse a distintas situaciones mientras salen a patrullar, bien sea crímenes violentos, delitos, accidentes, etc.
Pero, más allá de estos incidentes, también ocurren otro tipo de emergencias, como lo es el parto espontáneo. Algo así es a lo que, estos dos oficiales tuvieron que enfrentarse en la ciudad de Ribeirão das Neves, en Brasil.
Ambos estaban cumpliendo una ronda preventiva en un barrio cuando se encontraron con una familia en situación de desesperación. Los integrantes de la familia se acercaron a la patrulla para pedir ayuda de la policía, ya que una de sus integrantes estaba a punto de parir y ya no daba tiempo de trasladarla a un hospital.
Cuando los oficiales militares entran a la vivienda, pudieron ver a la mujer ya a solo segundos de traer a su hijo al mundo. No había tiempo de ser examinada por un médico, había que actuar cuanto antes.
Livingstone Ribeiro, teniente que se encontraba al mando de ese grupo de policías, señaló que al principio, la familia quería que los policías se llevaran a la mujer hasta un hospital, pero, al pasar el tiempo se dieron cuenta de que ya no se podía.
La oficial de policía fue la que se acercó hasta la mujer con las contracciones y la ayudó a dar a luz. Unas horas más tarde, nació el bebé completamente sano y sin complicaciones de salud. La teniente expresó que “El sentimiento de deber cumplido en servir y proteger siempre“.
Luego de nacer el bebé, los policías se llevaron a ambos, madre e hijo, al centro de salud más cercano. En el Hospital Risoleta Tolentino Neves, recibieron la atención médica necesaria.
La verdad es que, cada día ocurre un milagro y, este bebé es muy afortunado.