Guadalupe LLori fue elegida después de 48 horas de debates
Una mujer indígena y antigua presa política en las cárceles de la revolución de Rafael Correa, fue elegida como presidenta del parlamento. Este nuevo panorama muestra que ha comenzado el cambio en Ecuador y las sorpresas han comenzado a surgir. La diputada del Movimiento de Unidad Plurinacional Pachakutik (PK), Guadalupe LLori luego de un largo debate fue elegida a través de votación de mucha tensión.
Su elección se debe al resultado de los votos de la alianza conformada por PK (indígena, ecologista e izquierdista) y por Izquierda Democrática (ID, centro-izquierda) a quienes se sumó el conservador Movimiento CREO, la agrupación del presidente electo, Guillermo Lasso y varios independientes.
Nueva alianza
Este nuevo pacto de última hora supone la ruptura de de la alianza que llevó al poder a Lasso que aun no ha tomado juramento como presidente. Por su parte el Partido Social Cristiano (PSC) cerró un acuerdo con el correísmo para garantizarse la Presidencia parlamentaria, lo que inmediato hizo temer futuros indultos para los dirigentes de la revolución ciudadana encarcelados por corrupción. Sobre Correa que ha estado como prófugo reposa una condena de ochos años de cárcel.
Por otro lado la nueva parlamentaria LLori adelantó lo siguiente “el Gobierno entrante debe tener la gobernabilidad para que prevalezca la democracia, que implica la diversidad de opiniones, pero con el mismo objetivo del desarrollo del país”.
El mismo Lasso respondió en persona, a través de sus redes sociales, a la nueva parlamentaria: “Reitero mi compromiso a la función legislativa de trabajar en conjunto por el Ecuador. Éxitos en su gestión”
De esta manera se prevé la consolidación del cambio en Ecuador tras 14 años de control del correísmo y del disidente Lenin Moreno. Por primera vez en tantos años es elegida una representante indígena y se le concede el acceso a presidir el Parlamento.
Vale la pena resaltar que LLori es todo un símbolo en su país, ya que fue una de las primeras autoridades en oponerse a los abusos del gobierno de Correa. Como gobernadora de la amazónica provincia de Orellana, encabezó una huelga en las empresas petroleras contra Quito, que la condujo directamente a la cárcel, acusada de terrorismo y sabotaje. Asimismo fue destituida de su cargo.
Cabe destacar que la ruptura con el PSC dificultará un poco la gobernabilidad para Lasso, pero también abre un abanico de pactos en una apuesta por la unidad que a la postre fue un principal motor para su victoria electoral.