El mandatario nacional Nicolás Maduro, que en el pasado mes de agosto relanzó el bolívar eliminándole cinco ceros, informó este miércoles que empezarán a circular nuevos billetes que poseerán tres ceros adicionales, debido a la apresurada pérdida de valor de la moneda nacional bajo la hiperinflacionaria economía venezolana.
Con motivo al nuevo propósito comunicado por el Banco Central, la economía del país percibirá muy pronto la circulación de billetes de 10,000, 20,000 y 50,000 bolívares soberanos, que vendrán siendo los de mayor denominación.
Siendo así, el billete de 50,000 sobrepasará el actual salario mínimo, de 40,000 bolívares ($6.50), que solo alcanza para comprar unos dos kilos de queso. El billete de 500 bolívares no es suficiente para adquirir un huevo, ya que el mismo tiene un costo de 900 bolívares.
Los tres billetes nuevos sostienen en su lado frontal el perfil del libertador Simón Bolívar, un diseño semejante al del billete de 500 bolívares, según fotografías expuestas por el Banco central.
Por su parte, el reverso del mismo es diferente al grupo de papeles que empezó a salir a partir del 20 de agosto y que mantenía diseños de animales venezolanos. Los nuevos billetes tienen en su parte de atrás la imagen del Mausoleo del libertador.
Este nuevo pronunciamiento comprueba el fracaso que tuvo el plan de reconversión monetaria emitido para paralizar la inflación, informaron economistas entrevistados.
Al no ser amparado por órdenes pertinentes de estabilización macroeconómica, el nuevo bolívar ha experimentado un apresurado declive en su valor, pasando desde los 60 bolívares por dólar con que fue lanzado a mediados de agosto a los actuales 6,500 con que es valorizado en el mercado negro, añadieron.
Igualmente, el economista venezolano ratificó que “la señal que está mandando el gobierno con estas nuevas emisiones es que la hiperinflación continúa”, además, aseveró “algunos andan diciendo por allí que la hiperinflación se ha frenado”, pero si eso fuera asi el Banco Central no estaría añadiéndole ceros a la moneda.
Y posiblemente, el gobierno continuará haciéndolo en los meses venideros, o se verá en la necesidad de publicar nuevos relanzamientos e la moneda como el de agosto, donde convirtió cada 100,000 bolívares fuertes en un bolívar soberano, en perspectiva a su imposibilidad de tratar positivamente la inflación.
El gran inconveniente en la economía es la enorme pérdida fiscal que conserva el gobierno y que capitaliza través de la producción de dinero inorgánico.
“El déficit fiscal equivale hoy entre 58 y 60 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del país”, expreso el economista, al añadir que esa es una gran aglomeración monetaria disfrazada que extingue la economía venezolana. “La única forma de contener la hiperinflación es llevar el déficit fiscal a cero”.
El año pasado, la inflación cerró en Venezuela superando el millón por ciento y el Fondo Monetario considera que podría alcanzar el 10 millón por ciento para finales de este año 2019.
Los especialistas expresaron que vendrán días más difíciles para el país, manifestado por la decadencia de las condiciones de vida de una sociedad ya consternada por frecuentes dificultades en el servicio eléctrico, gasolina y de agua potable, asi como también, el progresivo desplome del sistema productivo.
El Director de la Firma Econométrica, Francisco Ibarra, dijo en una consulta actual que la aceptacion de medidas como estas, de cambiar el número de ceros de los billetes, no van a lograr nada para detener la hiperinflación.
“Venezuela tiene un colapso económico terrible, que va a continuar porque la hiperinflación hace que la economía se desmorone”, añadió Ibarra. “Hoy en día se están destruyendo una gran cantidad de cosas y la gente no tiene capacidad de ajustarse”.
