El alcoholismo es un problema real que puede desencadenar una serie situaciones que causan daños a la persona adicta y a sus familiares
Para muchas personas, ingerir alcohol es algo divertido, sin embargo, para una buena parte de ellas, se puede convertir en una verdadera pesadilla. Esto es porque, generalmente, la persona pierde el control con la bebida, lo cual hace que se vuelva adicta a ella y dejarla será muy difícil.
¿Qué diagnóstico dan los especialistas al problema del alcohol?
Al asistir al proveedor de atención médica, seguramente sospechará que ese paciente tiene un problema de alcohol y, con mucha seguridad lo remitirá a un profesional de la salud mental.
Estos especialistas aplican varios métodos para evaluar el problema, siendo de la siguiente forma:
- Hará preguntas en relación a los hábitos de bebida: de hecho, también pedirá permiso para hablar con algunos familiares y amigos. Debes saber que las leyes de confiabilidad no le permiten al médico que comparta la información sobre ese paciente sin su consentimiento.
- Examen físico: hay algunos signos físicos que pueden indicar que existen complicaciones debido al consumo de alcohol. Para ello, el profesional hará una evaluación física y puede que haga alguna pregunta al paciente.
- Indicará realizar análisis de laboratorio: aunque no existen exámenes de laboratorio que puedan diagnosticar este trastorno, si hay ciertos patrones en los resultados de dichos análisis que podrían indicarlo. Posiblemente, el paciente va a necesitar otros análisis específicos con el que su médico tratante pueda identificar problemas de salud que estén relacionados al consumo de alcohol. En los exámenes, se podrán visualizar cualquier daño a los órganos.
- Una evaluación psicológica: en ella destacará preguntas en relación a los síntomas, sentimientos, pensamientos y patrones de comportamiento. Seguramente le indicará al paciente que complete algún cuestionario para responder a las preguntas.
¿Cuál es el tratamiento que emplean para el trastorno del alcoholismo?
Para los consumidores de alcohol, generalmente se les manda un tratamiento que podría variar dependiendo de sus necesidades. Este puede incluir una intervención breve, un programa especial para paciente ambulatorio, una estancia de residencia para ser internado o un simple asesoramiento individual.
El objetivo principal de cualquiera de estos tratamientos es justamente, trabajar en el problema hasta que se suspenda por completo el consumo de bebidas alcohólicas, mejorando así la vida del paciente.
En reglas generales, el tratamiento para el alcoholismo consiste en lo que te mencionaremos a continuación:
Desintoxicación
Además de la desintoxicación, le suman el proceso de abstinencia, parte del tratamiento que es considerada como la más difícil de sobrellevar para el adicto. Este programa es controlado por un médico y dura entre 2 y 7 días. Con mucha seguridad, al paciente le serán administrados algunos sedantes durante el proceso para prevenir los síntomas asociados a la abstinencia.
La desintoxicación suele realizarse en un centro de tratamiento para pacientes internados o en hospitales.
Elaboración del plan de tratamiento
Se trata de la participación de los especialistas en el tratamiento para este mal, en el cual establecerán metas, así como también, las técnicas adecuadas para generar el cambio de comportamiento, empleo de manuales de autoayuda, orientación y atención de seguimiento en el centro de tratamiento.
Orientación psicológica
Este asesoramiento en conjunto con la terapia individual o grupal, ayudan a que el paciente comprenda mejor su problema de alcoholismo y se le brinda el apoyo necesario en su recuperación en base a los aspectos psicológicos.
Los medicamentos orales
Hay un medicamento llamado Disulfiram, el cual evita que el adicto beba. Algo que resulta importante destacar, es que, este medicamento no resuelve el problema de adicción a las bebidas alcohólicas, ni tampoco eliminará las ganas de beber.
Si el paciente llegara a beber mientras está bajo el tratamiento con Disulfiram, se producirá una reacción física que consiste en dolor de cabeza, enrojecimiento, vómitos y náuseas. Por otra parte, la Naltrexona es una medicina que bloquea el efecto placentero que es causado por el alcohol, pudiendo así prevenir el consumo excesivo de estas bebidas y reducir las ganas de beber. Del mismo modo, el Acamprosato ayuda a combatir el deseo de embriagarse una vez que el adicto haya dejado de beber. A diferencia de los dos medicamentos anteriores, el Acamprosato no produce malestar después de beber.
Inyecciones
El Vivitrol se inyecta una sola vez al mes, tratamiento que es mucho más fácil de usar constantemente para aquellas personas que todavía se están recuperando de la adicción al alcohol.
Apoyo constante
A través de los programas de postratamiento y de los grupos de apoyo, se le brinda la ayuda necesaria a los alcohólicos que están en recuperación. De esta manera, se ayuda a controlar las recaídas y a poder enfrentar todos los cambios que sean necesarios en el estilo de vida.
Tratamiento para los problemas psicológicos
Todo este problema del alcohol se produce en conjunto con otros trastornos relacionados a la salud mental. Quienes sufren de ansiedad, depresión o cualquier otra enfermedad mental, posiblemente necesiten asistir a una psicoterapia, someterse a medicamentos o a cualquier otro tratamiento especial.
Tratamiento médico para problemas de la salud
Al suspender el consumo de licor, muchos de los problemas de salud vinculados a esa adicción comienzan a mejorar de una forma significativa. Sin embargo, algunas afecciones médicas, podrían ameritar un tratamiento continuo y con atención de seguimiento.
Trasplante fecal
Estudios científicos han demostrado que, el trasplante fecal resulta muy eficaz para tratar los problemas del alcohol, gracias a que ayuda a la limpieza del hígado, evitando del mismo modo, que se desarrolle un cáncer en ese órgano vital.
Una práctica espiritual
Las personas que están involucradas en cualquier tipo de práctica espiritual, se les hace más fácil seguir con su recuperación para dejar de beber licores y hasta otras adicciones. Este sería entonces, un elemento clave para la completa recuperación en muchos de los pacientes con adicciones al alcohol.
¿Funcionan realmente los tratamientos para el consumo excesivo de licor?
Sin lugar a dudas la respuesta es sí, esa es una buena noticia, pues, no importa cuán grande sea el problema, la gran mayoría de las personas que tienen este trastorno de alcoholismo se pueden beneficiar de cualquiera de los tratamientos destinados a ello.
Muchos de los estudios que los especialistas han llevado a cabo, demuestran que al menos un tercio de los adictos que reciben tratamiento para su adicción no presentan síntomas un año más tarde. Otra gran parte de ellos, hasta eliminan radicalmente la bebida de su vida y se disminuyen los problemas de salud asociados a este vicio.