Este viernes, las autoridades ucranianas han confirmado que una planta de reparación de aviones cercana al aeropuerto de la ciudad de Leópolis, a unos 50 kilómetros de la frontera con Polonia, ha sido destruida tras los intensos ataques de las tropas rusas.
El alcalde de Leópolis, Andri Sadovi, envió un mensaje por Telegram manifestando que varios misiles impactaron en la planta de reparación de aviones, dejando todo destruido. Asimismo, aseguró el trabajo había sido paralizado con anterioridad y que, por fortuna, no hay víctimas del ataque.
Por su parte, desde ya están trabajando los equipos de rescate en el lugar, pues, los medios de comunicación ucranianos informaron acerca de varias explosiones que se registraron en el aeropuerto de Leópolis, sin embargo, el aeródromo no ha sido alcanzado.
Esta ciudad se encuentra alejada de las zonas clave de bombardeos que comenzaron con la invasión el pasado 24 de febrero por parte del Ejército ruso, el cual bombardeó también las bases aéreas en Ivano-Frankivsk y Lutsk, al oeste del país la semana pasada.
El enemigo avanzando hacia Rubizhne
Por otro lado, Sergii Haidai, gobernador de la provincia separatista de Lugansk, aseguró que las tropas enemigas de Rusia intenta «tomar» la zona de Rubizhne y Severodonets. Mientras tanto, las autoridades está preparando ya un corredor humanitario para el 20 de marzo, según informó.
Fue a través de un video que se publicó en Telegram mediante el canal oficial de la Milicia Popular de la República Popular de Lugansk (LPR), que un soldado uniformado señaló que la bandera separatista está ondeando en la ciudad.
Del mismo modo, informó el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Ucrania unas horas antes que las tropas rusas ya están avanzando con destino hacia Severodonetsk, a unos trece kilómetros de Rubizhne.
Según Haidai, estos bombardeos no han cesado en la zona, tanto en Severodonetsk, como en Popasna, Lysychansk y Kreminna. Todavía el Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas ucranianas, está tomando las medidas necesarias para “reparar la pérdida de personal a expensas de los extranjeros».
A pesar de esto, aseguraron que las fuerzas rusas han reclutado a unos 1.000 voluntarios del llamado Ejército de Bashar al-Assad y Hezbolá.
Mientras tanto, en los alrededores de la capital los bombardeos han dejado un saldo de un muerto y tres heridos, entre ellos un niño este jueves pasado.
